Hoy es miércoles de Ceniza el cual marca el inicio de los 40 días de Cuaresma y en tema gastronómico se caracteriza por la abstinencia de consumir carne, al igual que el resto de viernes de Cuaresma.
El potaje de Cuaresma también potaje de Vigilia, es uno de los guisos más tradicionales de la Cuaresma ya que no contiene carne, se cocina con garbanzos, bacalao en salazón que tendremos que desalar y espinacas acompañado de un majado de ajos, almendras y pan frito.
He de confesarte que cuando era pequeña y aún adolescente, la Cuaresma era un suplicio, no me gustaba el pescado. Creo que por esa época pasamos todos cuando somos pequeños o jóvenes, en casa también lo he pasado con mis hijos y en ese momento comprendí el enfado de mi madre y abuela por mi reacción al ver ante mi todo lo que llevaba pescado.
Hoy en día soy adicta a los guisos sean de lo que sean y este potaje de Cuaresma tal y como lo hacía mi madre, hoy en día es mi favorito, cosas de la vida.
Antes de pasar a receta te quiero contar que este potaje está hecho con garbanzos cocidos, con lo cual con un bote de 400 g escurridos tienes suficiente para 4 ó 5 personas, depende de lo comedores que seáis. Ya que estamos con los garbanzos, te contaré un secreto que me dijo mi abuela para evitar esas indeseadas flatulencias en el caso de que los cuezas en casa, es muy sencillo, debes poner los garbanzos a remojo con agua templada e ir cambiándola 3 ó 4 veces, cuando las vayas a cocer, cubre los garbanzos con agua, llévalo a ebullición y cuando se empiece a formar una espuma blanca, verter los garbanzos en un colador y desecha el agua, repite esta operación 3 veces, no te llevará mucho tiempo y notarás la diferencia.
Otra cosa que puede ser de tu interés, NO LE AÑADAS SAL hasta el momento en que vayas a comer, ya que con la sal que lleva el bacalao muchas veces es suficiente.
Este Potaje de Cuaresma, está más rico con unas horas de reposo o de un día para otro y es muy fácil de preparar.
Ingredientes: (4 personas).
- 400 g de garbanzos cocidos o 150g secos.
- 400 g de espinacas frescas.
- 300 g de bacalao desalado desmenuzado.
- 1 cebolla mediana.
- 2 tomates para freir o 3 cucharadas soperas de tomate frito casero.
- 2 dientes de ajo.
- 45 g de almendra tostada sin sal.
- 1 rebanada de pan de hogaza o 2 de barra normal, tostado.
- 1 cucharadita (café) de pimentón de la Vera.
- Aceite de oliva Virgen Extra.
- Pimienta.
- 3 huevos duros.
- Cuece los garbanzos, en el caso de que los tengas a remojo y después de hacer lo que te he comentado más arriba, cuecelos con abundante agua durante 2 horas más o menos.
- Desala el bacalao, ponlo a remojo la noche antes y cambia el agua dos o tres veces antes de acostarte.
- Lava y limpia las espinacas.
- Cuece los huevos.
- Tuesta el pan.
- Una vez todo preparado, cubre el fondo de la olla con aceite de oliva, calienta y fríe la cebolla cortada en brunoise (trozos pequeños), agrega el tomate y tras un minuto añade el pimentón, dale unas vueltas e incorpora las espinacas, remueve y por último, añade los garbanzos cocidos, dale unas vueltas y cúbrelos de agua..
- Prepara el majado de los ajos, las almendras y el pan tostado con el mortero o con una picadora y lo añades al potaje, deja que hierva todo 10 minutos.
- Es hora de incorporar el bacalao desalado, hierve 5 minutos y agrega los huevos duros cortados en trozos pequeños, sigue hirviendo durante otros 5 minutos, apaga el fuego y deja reposar.
Por sí después de este rico Potaje te apetece preparar algún dulce típico de Cuaresma, te dejo los enlaces con unas ideas:
Unas deliciosas Torrijas hechas en asadora para quitar alguna caloría.
La típica Leche frita servida sobre una sopa de chocolate.
Espero que haya sido de tu agrado, si es así me encantará leer tu comentario y si tienes alguna pregunta o sugerencia, también estaré encantada de leerte y contestarte.
¡Muchas gracias por tu visita!
Buenos días Merche. Yo nunca fui niña de poner pegas a la comida, pero con el bacalao era una cosa mala, me lo comía protestando, pero acababa rebañando el plato, jajaja..., Por supuesto que eran cosas de pequeños, porque en cuánto fui yo quién cocinaba, se me quitaron todas las tonterías (si es que tenía alguna).
ResponderEliminarYo también hago lo que aconsejas de enjuagar la legumbre, aunque solo con las judías, nunca lo he hecho con los garbanzos, por miedo a que se "encallen" pero si tú dices que funciona, lo haré. Con las judías ya lo hacía mi madre, y es cierto que se digieren mucho mejor y no producen flatulencia. Son consejos que hay que poner en conocimiento de todos para recuperar las buenas costumbres de nuestra dieta mediterránea.
Utilizar garbanzos cocidos es una alternativa ideal para cuando vamos justos de tiempo, o hemos olvidado ponerlos en remojo, que a veces nos pasa.
Besos
Buenas tardes, Concha. Pues yo hasta bien mayorcita no he podido con el pescado, ahora me encanta y este guiso lo hago siempre que me apetece aunque no sea Cuaresma.
EliminarMe alegra saber que los consejos de nuestras abuelas o madres siguen funcionando, no entiendo a qué te refieres con encallen, lo llevo haciendo casi 40 años y salen genial, las legumbres cocidas van genial cuando no te ha dado tiempo a ponerlas a remojo o quieres un plato rico y rápido.
Un besazo y muchas gracias Concha.
Merche, en argot de cocina, ‘encallar’ se refiere a cuando las legumbres, especialmente los garbanzos, se endurecen debido a no añadirlos a la cocción con la temperatura adecuada del caldo o agua, y por mucho tiempo que los cuezas, no hay manera de ablandarlos.
Eliminar¡Hola Merche! Resulta muy agradable poder pasar por tu cocina porque está funcionando de nuevo.
ResponderEliminarMe ha llamado mucho la atención la coincidencia en ingredientes de tu elaboración, con una de las que hacía mi madre, solo faltan unas hebras de azafrán. La experiencia que tenemos es que siempre existen diferencias entre un hogar y otro, aquí se ha roto esa estadística.
Yo de pequeña huía del bacalao, y en casa lo ponían con cierta frecuencia, así que al final me gusta en ensalada con naranja, frituras de bacalao, pero no mucho más.
Tu plato tiene presencia en mis recuerdos, se ve que te ha quedado de fábula, el caldo trabadito y con un rico sabor.
Feliz finde. 😘
¡¡Hola Merche!! Nos queda poco más de un mes para la semana santa, y al igual que tú, en mi casa los viernes no se comía carne cuando era más pequeña, pero cuando mi hermana y yo decidimos no respetarlo ya, ellos tampoco lo hacían. A mí siempre me ha gustado el pescado, lo prefiero a la carne, y me encantan todos los pescados excepto el bacalao, y mira que los garbanzos me encanta, pero sigo sin poder con el potaje. Creo que para comérmelo tendría que sustituir el bacalao por merluza o algo así. Ni siquiera el bacalao a la miel, que es de la única manera que lo suelo probar me termina de convencer. Y eso que pensaba que con azúcar me lo como todo, ja, ja. Pero bueno, por lo demás, creo que al resto de personas les va a encantar tu potaje.
ResponderEliminarPor cierto, el truco de mi madre para los garbanzos es ponerle un poco de bicarbonato mientras están en el agua de remojo y quedan muy tiernos y digestivos. Besitos.